Ottawa, la elegante capital de Canadá, es una ciudad llena de arte, patrimonio y ciencia. La ciudad aúna edificios góticos victorianos y arquitectura ultramoderna, ha alcanzado un equilibrio entre naturaleza y tecnología y cuenta con una oferta gastronómica internacional.
Para comenzar, visita el Parlamento, en Parliament Hill, donde podrás ver su biblioteca y la emblemática torre de la Paz. Son edificios de estilo neogótico decorados con techos revestidos de pan de oro y bellas imágenes del pasado de Canadá. Explora el Centre Block y escucha los debates políticos que se mantienen en la Cámara de los Comunes y en el Senado. Para seguir disfrutando de otras muestras de arquitectura neogótica, visita la Basílica-catedral de Notre-Dame, declarada lugar histórico nacional y cuyas galerías superpuestas, vidrieras y altares de exquisita decoración no puedes dejar de admirar.
La capital del país ofrece infinidad de galerías y museos que explorar. El museo militar, Canadian War Museum, permite sumergirse en la historia bélica moderna. Para conocer cómo ha contribuido el país a la historia de la aviación, visita el Museo del Espacio y la Aviación de Canadá, y pásate por el Museo Canadiense de la Civilización para maravillarte ante el progreso de la humanidad. Si quieres ver obras de grandes maestros del arte y aprender sobre otras de artistas más recientes mientras descubres el rico patrimonio cultural de Canadá, tienes una cita con la Galería Nacional de Canadá.
Cualquier época del año es buena para visitar la ciudad de Ottawa, que en invierno ofrece actividades en la nieve y en verano excursiones de senderismo. Descubre fincas históricas, bellos paisajes naturales y una rica biodiversidad en el popular parque de Gatineau. En verano, puedes dar un paseo en barca por el canal Rideau, que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad. En invierno, el canal se transforma en la pista de hielo natural más grande del mundo, para diversión de los patinadores.
Resulta fácil moverse por Ottawa, ya que la mayoría de sus atracciones se encuentran a poca distancia a pie entre sí. Antes de la visita, consulta los horarios de apertura de cada museo, ya que pueden variar en función de la temporada y del día de la semana. La temporada alta tiene lugar en los meses de verano, de junio a agosto, mientras que la baja va de noviembre a abril.