Vacaciones en Oppido Lucano

Todo impecable, desayuno excelente, recepcion y muy buena habitacion sin duda lo recomiendo para visitar Puglia

En el baño bañera sin manpara. Cuando nos bañamos el agua cae al piso.

Un hotel moderno con unas instalaciones cuidadas y personal agradable. El desayuno deja un poco que desear, con poca variedad y muy repetitivo todos los días. Las máquinas de café se estropeaban todos los días. La reposición tanto de platos, tazas, cubiertos, como de alimentos había que advertirlo a los camareros, ya que ellos no estaban pendientes. Por otra parte, en la piscina es obligatorio el uso de gorro. Si no le llevas, te le venden en el bar de la piscina por 3 € cada uno. La parte buena es que tienen toallas sin coste. Los socorristas muy amables te acomodan en la zona de tumbonas que quieras y te abren la sombrilla. En general el hotel está muy bien si quieres estar en un sitio tranquilo.

El desayuno es extraordinario. Las alfombras de las habitaciones necesitan cambios están muy sucias. Si te dan una habitación con vista a la calle, tendrás todo el ruido de la calle. Si te dan una habitación en el interior en el patio. Tendrás todos los ruidos del patio. Tienen un serio problema de ruidos en general, se escucha en la noche que se rompen cosas y motores. Las habitaciones son muy calientes y huelen raro el hotel necesita una reforma total. Lo único bueno es el bufet del desayuno, tiene cosas muy buenas y el café es muy bueno y el personal de del hotel es amable. pero pues es un hotel viejo en general