Middelburg es un destino fabuloso por su bonita arquitectura, sus museos, la cercanía del mar y una agradable zona comercial. Organiza unas vacaciones en Middelburg en familia o con tu pareja: tiene atractivos para todos los gustos.
Middelburg recibió el título de ciudad a principios del siglo XIII. A lo largo de los siglos se construyeron diversas fortificaciones: mirando el mapa de la ciudad hoy en día, podrás reconocer el canal en forma de estrella que protegía la ciudad antiguamente.
Solo se conserva una de las puertas del a ciudad, Koepoort. Su arquitectura barroca es una buena muestra del pasado de la ciudad. Otro de los edificios más fascinantes de Middelburg es el antiguo ayuntamiento. Se construyó en el siglo XV y no podrás irte sin hacerle una foto.
Para hacerse una idea general de la ciudad, no hay ningún sitio como la torre Lange Jan. Sube sus 207 escalones para disfrutar de una vista espectacular y recupera la energía tomando algo en una de las cafeterías de la plaza del mercado, cuyo origen es del siglo XIII.
Las familias con niños no se pueden perder Mini Mundi, un parque temático en los límites de la ciudad. Allí verán todo tipo de edificios en miniatura de la región de Walcheren, además de divertirse en un gran parque de juegos infantil. También hay varias playas bonitas, como Nollestrand en Vlissingen y De Hoge Hilt en Zoutelande.
Es fácil explorar la ciudad y sus alrededores a pie o en bicicleta. Y podrás pasar unos días de relax en la playa. Si viajas en coche, puedes dejarlo en la calle o en uno de los aparcamientos de pago. Hay un aparcamiento disuasorio mucho más conveniente.
Middelburg cuenta con una estación de tren, pero es más fácil y más rápido llegar en coche.
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