Vuelos baratos a Guísamo

Al viajar en avión, solo tienes una opción: La Coruña (LCG) es el único aeropuerto de Guísamo.

Este aeropuerto se encuentra a 9 km: ¡muy práctico!

Como este destino dispone de más de un aeropuerto, es posible que te cueste decidir a cuál volar: Santiago de Compostela (SCQ-Lavacolla) (a 45 km) o La Coruña (LCG) (a 9 km). Posiblemente te interese volar hasta el que tenga mejor combinación con tu hotel, ¿verdad?

En total, 12, que ofrecen rutas desde 37 aeropuertos.

Las líneas aéreas principales son Iberia y Air Europa; y el vuelo de Iberia que sale de Castellana es de los más populares.

Tienes 341 vuelos directos cada semana.

Las rutas desde los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Londres son las que tienen más adeptos.

Puede variar según tu punto de partida: desde Madrid son 1 h y 12 min; desde Barcelona, 1 h y 47 min, y desde Londres, 2 h y 1 min.

Para ahorrar en el vuelo, lo más básico suele ser no dejar la reserva para última hora. También te animamos a comprobar los precios de los billetes según el aeropuerto o la aerolínea. Aunque si algo tenemos claro es que, cuando veas una tarifa tentadora, no la puedes dejar escapar: ¡suelen volar!

Si no quieres que el trayecto te resulte demasiado largo, tenemos un buen remedio: unos cuantos consejos básicos para que tus vacaciones arranquen de la mejor manera.Primero, recuerda la importancia de tener a mano algunas cosas: por ello, no te olvides de subir a cabina todo lo que puedas necesitar durante el trayecto. Son indispensables un neceser básico, un libro electrónico o un portátil con muchas películas, el cargador, medicinas y un poco de dinero por si te apetece algún capricho.Tampoco vayas al aeropuerto sin revisar previamente que tu maleta de cabina no incluye objetos prohibidos. Por ejemplo, objetos punzantes, como navajas o tijeras, productos inflamables o envases con líquidos que excedan los 100 ml.Y, para finalizar, aunque nos encante salir elegantes en las fotos, en el avión, la comodidad es lo primero, especialmente en trayectos largos. El calzado es esencial; piensa que es muy habitual que se te hinchen los pies. Además, dejar para otro momento la ropa muy ceñida te dará libertad de movimientos y te ayudará a no sufrir el llamado síndrome de la clase turista.

Si te fijas en estos aspectos, pasar el control de seguridad será un mero trámite: No dejes la tarjeta de embarque ni la documentación en el fondo del bolso, ya que te lo pedirán para pasar el control. Examina los bolsillos y quítate el cinturón o cualquier cosa de metal que lleves contigo; la chaqueta también debe ir por la cinta. Recuerda que los portátiles, las tabletas y dispositivos del estilo deben ser fáciles de sacar de entre tus cosas, porque tienen que ir aparte al pasar el control. Puedes llevar líquidos a bordo, pero cada envase no debe superar los 100 ml y en total debe sumar 1 l como máximo. A nadie le apetece descalzarse en el control de seguridad; evita los tacones, zapatos con plataforma o suelas muy gruesas: unas zapatillas de deporte son perfectas. Y, ante todo, asegúrate de que no se te haya colado algún objeto peligroso, como navajas, tijeras, etc., en el equipaje de mano; puedes meterlo en la maleta facturada.