- Aspectos positivos: Limpieza
- Aspectos negativos: Servicios
Un hotel en pleno centro de Oporto, edificio historico, bonito por fuera, algo incomodo por dentro. La habitacion muy estrecha, poco espaciosa, con techos altos y muebles antiguos al estilo de todo el edificio Lo mejor de la habitacion la ducha y las vistas. Las camas son aceptables, un poco duras para mi gusto, la habitacion limpia, con suelos de madera antigua de esos que crujen, y un balcón bonito con vista a la avda Aliados, que tiene el atractivo de sus fachadas historicas. Aunque los ventanales reducen considerablemente el ruido, se oye algo de escandalo por la noche al ser una calle muy centrica. El personal de recepcion correcto, educado pero seco y poco amigable, flematico. El buffet poco variado, algun bollo, algo de fruta y fiambre, pero no hay bacon, huevos, salchichas... en fin más tipo continental que inglés. No tiene parking, y es un problema si se viaja con coche dada su ubicacion muy centrica; tienen acuerdo con un parking publico cercano pero es caro y no te aseguran disponibilidad de plaza. La entrada es a traves de portal, da la sensacion de estar entrando en una pension mas que en un hotel, y tiene ascensor pero el primer tramo es de escaleras, algo incomodo para acarrear las maletas. En definitiva, caro para lo que ofrece, se paga el edificio historico y la ubicacion, que por otro lado si viajas con coche puede ser un inconveniente, asi como el ruido tanto de dia como de noche. Un hote en el que seguramente no repetiria.