Seguro que alguna vez has visto los juegos por la televisión. Los viajes a Lausana son la excusa perfecta para ver cómo cobran vida en este museo. El edificio de la institución está en una ubicación inmejorable en la orilla del lago de Ginebra, en Lausana, Suiza.
Comienza tu excursión por el Mundo Olímpico en la primera planta. Aquí aprenderás sobre los más de 2.200 años de historia olímpica. En la planta baja se exhiben objetos y recuerdos emblemáticos de los juegos. Observa la innovadora bicicleta que utilizó Chris Boardman en los juegos de 1992 y los famosos zapatos dorados que ayudaron a Carl Lewis a ganar sus medallas de oro en 1984.
Sumérgete en el ambiente de los juegos en la sección del Espíritu Olímpico. Pon a prueba tus habilidades físicas y mentales con los ejercicios interactivos. Observa toda la colección de antorchas y medallas olímpicas.
Revive los momentos olímpicos importantes en la sala de cine en 3D. Visita las exposiciones temporales, que varían constantemente y pueden incluir exhibiciones y películas sobre la historia, los héroes y los nuevos deportes de los Juegos Olímpicos.
El Parque Olímpico está en el exterior. Su terreno impecablemente cuidado cuenta con varias esculturas relacionadas con el deporte. El Fuego Olímpico está siempre encendido en el pebetero, creado por André Ricard. Prepara comida para disfrutar de un pícnic rodeado de obras de arte.
Y no te olvides de comprar un recuerdo olímpico en la tienda TOM. Esta tienda, situada en el vestíbulo, es un buen sitio para comenzar o terminar tu paseo por el museo.
También puedes tomar algo en la cafetería TOM. Se trata de un espacio al aire libre ubicado en el piso superior del museo que cuenta con una vista fantástica del lago de Ginebra y de los Alpes. Además, la cafetería tiene un menú de almuerzo los fines de semana.
De mayo a mediados de octubre, el museo está abierto todos los días. Durante el resto del año, el museo permanece cerrado los lunes. También cierra en Navidad y Año Nuevo. El precio de la entrada varía en función de la edad. Puedes realizar una visita guiada o alquilar una audioguía para complementar el recorrido.
Es fácil llegar al Museo Olímpico tanto en vehículo privado como en transporte público. Si decides conducir, deja el coche en el aparcamiento de las inmediaciones. Convierte el trayecto en un viaje único desplazándote en barco. Durante la temporada alta, hay salidas regulares desde Evian, Montreux, Vevey y Villeneuve.