El glaciar de Morteratsch es un gigante de hielo blanquecino con pendientes nevadas y hermosos senderos. En ellos verás varias placas que muestran la progresiva descongelación del glaciar debido al calentamiento global. Sin duda, este es un tema sobre el que reflexionar en tus viajes a Pontresina, mientras paseas entre los árboles que se encuentran junto a esta serena e impresionante masa de hielo.
Para llegar al glaciar puedes subir a pie desde la estación de Morteratsch. Se trata de un trayecto de menos de una hora, en el que cruzarás pequeños arroyos y podrás admirar los bosques que cubren las ondulantes colinas nevadas.
A lo largo de la ruta verás paneles informativos que muestran hasta dónde llegaba en otros tiempos la masa de hielo. Puedes aprovechar esta oportunidad para hablar a tus hijos sobre las consecuencias del calentamiento global y reflexionar sobre el efecto que este proceso tiene sobre los recursos naturales del planeta. Hace solo 120 años, el glaciar penetraba todavía 2 kilómetros más en el valle.
A lo largo del sendero encontrarás 16 puntos de parada donde podrás hacer un descanso si lo necesitas. Te recomendamos traer aperitivos y bebidas para disfrutar de un pícnic irrepetible en este sosegado lugar. En los hoteles cercanos y en el centro de información turística de Pontresina, al norte, puedes contratar visitas guiadas y obtener folletos informativos. Esta información incluye yincanas para los niños y relatos sobre el fantasma del glaciar, Sabi.
Un dato que conviene tener en cuenta es que, en primavera, si hay nieve suficiente, se abre una pista de esquí de 10 kilómetros en el glaciar para el deleite de los esquiadores más avanzados. Después de tu visita, coge el tren en la parte inferior del glaciar y relájate con una merecida comida en uno de los restaurantes cercanos a la estación base.
El glaciar de Morteratsch se encuentra en la parte suroeste de Suiza, cerca de la frontera con Italia y Austria, a unas tres horas en coche de Zúrich, Milán e Innsbruck. Forma parte del macizo de la Bernina, en los Alpes de Bünder, y el acceso es gratuito. Para completar tu visita puedes aprovechar para visitar las estaciones de esquí y los picos de montaña de esta singular ubicación. Aunque se puede acceder al glaciar durante todo el año, infórmate a través de los expertos locales sobre las condiciones durante tu visita para garantizar la seguridad y la diversión.
