Hotel muy céntrico para visitar todo el conjunto monumental y museos del centro histórico. Está en una calle a penas a 100 metros del Duomo, con mucho bullicio de día pero muy tranquila de noche. También esta cerca de la estación Santa Maria de Novella, donde te deja el autobús que viene del aeropuerto. El hotel está en una tercera planta de un edificio antiguo por lo que no tiene ascensor, lo que no es mas inconveniente si no llevas mucho equipaje. La habitación da a la calle principal y esta bien equipada, TV, Aire acondicionado,mini bar y un baño muy nuevo y curioso. El desayuno incluido en el precio esta bien pero le falta un poco de variedad.