Finisterre es un municipio gallego con un alma única. Se dice que en el cabo en el que se asienta, tempo ha acababa el mundo conocido. Más allá solo se extendían vastos océanos en los que nunca nadie se había atrevido a aventurarse. Hoy en día, ya no nos creemos los cuentos del fin del mundo, pero asomarse a este enclave sigue produciendo una sensación de libertad para unos y melancolía para otros que no desaparece con el paso del tiempo. Solo tendrás que mirar los viajes a Finisterre que ofrecemos para averiguar cuál de las dos sensaciones obtendrás.
No se sabe exactamente cuándo se fundó Finisterre, pero ya atraía en el siglo I a geógrafos grecorromanos. El general que dirigió la conquista romana de Galicia, Décimo Junio Bruto, describió el atardecer desde aquí como un espectáculo de fuego que se perdía en el mar. Un poco más tarde, en el siglo XII, ya era común acabar el peregrinaje del Camino de Santiago, lo que trajo riqueza cultural y arquitectónica a la zona. Descúbrelo con uno de nuestros viajes baratos a Finisterre.
Entre el legado arquitectónico dejado en la ciudad, no te puedes perder el castillo de San Carlos, del siglo XVIII, que defendía la costa de los barcos extranjeros. Otro buen ejemplo es la iglesia de Nuestra Señora de las Arenas, de finales del siglo XII. Pero la atracción más visitada, no solo de Finisterre sino de Galicia entera, después de la catedral de Santiago de Compostela, es el faro de Finisterre, el más importante de la costa de la Muerte e imprescindible guía para los barcos que navegan en la oscuridad de la noche. Compruébalo con uno de nuestros paquetes de vacaciones en Finisterre.
Y hablar de Galicia sin mencionar su gastronomía sería un sacrilegio. No te vayas sin probar los percebes, los berberechos, las cigalas y todos los mariscos típicos de la zona.
Después de todas las razones que te hemos dado… ¿no te entran ganas de irte con Finisterre hasta el fin del mundo?