En esta zona de la llanura del Volturno solo había un pueblecito agrícola, que a lo largo de las décadas ha ido creciendo gracias al influjo de habitantes procedentes de Casertavecchia, un pequeño pueblo encaramado a la montaña. Además del palacio, en el centro de la ciudad es posible admirar otras obras de gran valor artístico, como la catedral o la iglesia de San Sebastián. Cualquier época del año es buena para disfrutar de unas vacaciones en Caserta ¿A qué esperas? ¡Te esperan aventuras inolvidables!
Caserta puede presumir de tener un aspecto bastante moderno, y la visita al magnífico palacio merece sin duda la pena. Casertavecchia, por su parte, ofrece una gran variedad de monumentos históricos que explorar. Disfruta de una atmósfera única al recorrer las callejuelas y los restos de las antiguas murallas. Lo que más sorprende de este pueblo es la gran variedad de itinerarios disponibles, que te permiten combinar cultura y relax. Este centro histórico es el punto de partida de nuestro viaje cultural, entre antiguas calles que han sabido conservar su función social, ya que hoy en día los habitantes siguen reuniéndose en ellas para desayunar o charlar. Encontrarás muchos sitios donde parar a disfrutar de un café o un aperitivo, o para descubrir el auténtico ambiente casertano en sus rincones más solitarios. ¡Busca un viaje barato a Caserta para disfrutar de esto y mucho más!
La catedral (o Duomo) es fruto de varios estilos artísticos, debido a sus diversas restauraciones y renovaciones a lo largo de los siglos. Las obras de construcción de la catedral empezaron en 1129, bajo el episcopado de Rainulfo, y terminaron en la época del obispo Juan I, como se deduce de los escritos situados en los portales derecho, izquierdo y central de la catedral. Son precisamente estos los elementos que proporcionan a la catedral una auténtica fusión de estilos arquitectónicos, más allá de la reconocible huella medieval de su estructura. La iglesia tiene una planta en forma de cruz latina, lo que pone de manifiesto la marcada división en dos secciones principales, con dos entradas en los laterales: una en el lado oeste, situada en la plaza del Vescovado, que funciona como atrio y otra hacia el sur, donde se extiende la calle que rodea el campanario.
El palacio de Caserta, proyectado por encargo de Carlos III de España, es el más grande de toda Italia. Se construyó entre 1752 y 1845 según los planos de Luigi Vanvitelli, a quien pidieron que diseñara una residencia a la altura del Palacio de Versalles. El rey Borbón eligió esta zona por la belleza del paisaje y porque la consideraba menos vulnerable a los ataques enemigos en comparación con la cercana Nápoles, la entonces capital del reino. Aquí vivió el rey Fernando I de las Dos Sicilias con su corte, dando a este palacio su reputación de centro cultural y social de las Dos Sicilias. Además del complejo arquitectónico, considerado la última obra maestra del barroco italiano, el palacio consta de un jardín con una superficie de 120 hectáreas.
Casertavecchia ofrece una rica variedad de sabores y productos que están a la espera de que vengas a descubrirlos, todos ellos caracterizados por sus tradicionales métodos de procesamiento y almacenamiento consolidados a lo largo del tiempo. ¿A qué esperas? ¡Echa un vistazo a nuestros paquetes de vacaciones en Caserta y prepárate para una experiencia única!





