Durante tus vacaciones en Bran, te esperan cuentos de vampiros, hombres lobo y otros misterios de la noche. En este pueblo de Transilvania se encuentra el legendario castillo de Bran, que, según muchos, inspiró el hogar de uno de los personajes más intrigantes de la literatura, el conde Drácula. Antes de visitar el castillo medieval, echa un vistazo a los campos, bosques y montañas que rodean el terreno.
La fortaleza, que data del sigloXIV, se encuentra en un escarpado acantilado que se alza sobre el pueblo. Durante su larga historia, se ha utilizado como residencia real y como hospital en la Segunda Guerra Mundial. Mientras exploras las habitaciones, los patios y los pasadizos, verás colecciones de arte, muebles y armas que tienen siglos de antigüedad. Encontrarás más elementos del castillo, como algunos muebles, en el Museo medieval de Bran.
Si reservas uno de nuestros viajes baratos a Bran, aprovecha para visitar otros castillos de la zona. Entre otros, están la fortaleza de Rasnov y el castillo de Peles, ambos en los montes Cárpatos.
Si te queda algo de tiempo en el itinerario, explora el espectacular paisaje natural en el que se enmarca Bran. Puedes ir de excursión por los senderos señalizados del parque nacional de Piatra Craiului, a través de bosques, montañas y lagos glaciares. Si vas entre marzo y noviembre, puedes ver osos pardos desde el observatorio. En el parque se ofrecen otras actividades, como escalada en roca y visitas guiadas para conocer la vida silvestre. En el parque natural de Bucegi, podrás sacar fotos de formaciones rocosas tan intrigantes como la "esfinge" y las "ancianas".
No te pierdas el mundo subterráneo de la cueva de Valea Cetatii, que tiene una gran sala central. Si te gustan los sitios cavernosos, otro muy interesante es el monasterio y la cueva de Ialomicioara.
Con nuestros paquetes de vacaciones en Bran, puedes coger un avión hasta Bucarest y, desde allí, conducir poco menos de tres horas hacia el norte. Otra opción es coger un tren de la capital rumana a Brasov, que está a menos de treinta kilómetros de Bran. Desde allí, puedes coger un autobús o un taxi para llegar a este destino rebosante de misterio, historia y belleza natural.