Aprovecha una oferta de viaje a Auckland para visitar Bethells Beach, también conocida como Te Henga, que significa "arena". Se trata de una isla aislada, a 30 kilómetros al noroeste de Auckland, en la desembocadura del río Waitakere. La arena negra y el mar salvaje están rodeados de dunas de arena y flora local, lo que conforma un hábitat perfecto para las aves.
Las dunas de Bethells Beach han formado parte recientemente de un exitoso programa de reproducción del chorlito de Nueva Zelanda, que está en peligro de extinción. Esta ave anida en hoyos cavados en la arena por encima de la línea de flotación, así que corre el riesgo de enfrentarse a depredadores que excavan la arena. Bethells Beach es uno de los pocos lugares en los que puedes verlos en su entorno natural. Otras muchas especies de pájaros habitan la zona, como aguiluchos, pukekos, currucas y petreles, además de los pingüinos azules, que suelen salir por la noche.
Existen pruebas de que hubo presencia humana en Te Henga hace más de 1.000 años. Algunos indicios de los antiguos habitantes que confiaron en los abundantes recursos de esta playa y los bosques circundantes son los concheros, un refugio en una cueva de la parte sur de la playa y un "pa" o pueblo fortificado interior, que se utilizaba para almacenar alimentos.
Las condiciones para nadar y surfear pueden ser muy peligrosas en Bethells, ya que suelen haber fuertes corrientes. Solo los nadadores expertos deberían enfrentarse a las olas. Puedes pasear por los caminos que recorren la flora y las dunas de arena en distintas direcciones. Llévate algo de comida para el camino de regreso de 2,5 horas hasta el lago Wainamu, o explora las cataratas Waitohi. Estos senderos también forman parte del extenso Hillary Trail, que recorre 75 kilómetros por la selva y la costa del parque regional de la cordillera de Waitakere.
Los días con buen tiempo, hay un camión de comida en Bethells Beach, pero se recomienda llevar comida porque la isla está bastante aislada. Deberás alquilar un coche para visitar la playa. Hay amplios espacios de aparcamiento gratuito detrás de las dunas y en la entrada del lago Wainamu.