Si reservas uno de nuestros viajes a Tavira, no puedes perderte su puente romano, desde el cual podrás disfrutar de bonitas vistas del casco antiguo. La estructura que vemos hoy no se parece a la que originalmente se construyó aquí. La primera versión se remonta al siglo XII, cuando el antiguo municipio formaba parte de al-Ándalus.
Recibe su nombre por su ubicación en la antigua carretera romana que unía Tavira con Castro Marim. Se erigió para salvar las aguas del río Gilão y, en la actualidad, resulta un verdadero placer examinar su arquitectura patrimonial y disfrutar de las bonitas vistas de la ciudad desde su tramo peatonal.
También puedes contemplar el propio puente desde la distancia en el moderno anfiteatro de la plaza de la República, la histórica explanada que se extiende frente al río. Verás que cuenta con siete arcos conectados por anchos pilares hexagonales. El arquitecto militar Mateus do Couto lo diseñó a mediados del siglo XVII para reemplazar el puente árabe. Una inundación en 1989 lo dañó seriamente y obligó a una reconstrucción parcial en los años noventa.
Durante el paseo comprobarás otros detalles, como la bonita barandilla de hierro pintada de verde y las farolas de estilo antiguo. Mientras observas los edificios históricos que flanquean la orilla del río, puedes imaginar el aspecto de la ciudad en la época medieval, cuando los árabes gobernaban Tavira.
Las bellas casas tradicionales que bordean el agua son del siglo XIX. Te será difícil marcharte del puente, y es que aquí se encuentra uno de los miradores más populares de la localidad, desde el que podrás sacar fotos inolvidables de las espectaculares vistas del Gilão, el mejor recuerdo que te llevarás de tu visita. Río abajo, tu mirada se encontrará con las frondosas palmeras del Jardim do Coreto y con los barcos que se mecen tranquilos en el puerto deportivo.
El puente romano se encuentra en el corazón histórico de Tavira, al norte de la plaza de la República. Puedes visitarlo de forma gratuita a cualquier hora del día. Quizá quieras incluirlo en tu recorrido a pie por la ciudad y aprovechar para visitar las magníficas iglesias antiguas en la orilla sur del río.