El hospital de la Santa Cruz es la institución de caridad más antigua de Inglaterra, un sanatorio donde se han cuidado a enfermos y necesitados durante cientos de años. Si lo visitas, los hermosos detalles de los vitrales y la cruz tallada en el interior de la iglesia te dejarán sin palabras. Y, en el exterior, te envolverá la paz de los jardines, donde crecen árboles plantados por diferentes miembros de la familia real.
Enrique de Blois, el nieto de Guillermo el Conquistador, fundó el hospital en 1132. Este lugar se construyó para atender a los pobres y a los peregrinos. Actualmente, todavía se ofrecen un pedazo de pan y una cerveza a los visitantes que llaman a la puerta.
Al entrar al hospital, acércate a las dependencias de los hermanos, que están en un lateral del complejo. Estas habitaciones se construyeron a mediados del siglo XV y pueden alojar a 25 personas. A cambio, trabajan como voluntarios en el hospital y la iglesia. Las altas chimeneas octagonales son la característica principal de estos aposentos.
El sendero que rodea el patio conduce a la iglesia. Es el único elemento del diseño original del hospital del siglo XII que aún se conserva. Los muros de piedra tienen más de un metro de ancho y se utilizaron materiales de construcción procedentes de lugares lejanos, como Normandía y la Isla de Wight. En el interior, altas columnas soportan el peso del techo abovedado. Los vitrales representan algunos de los hermanos que trabajan en este lugar. En una columna del pasillo norte podrás observar una bella cruz tallada, la Santa Cruz.
En el exterior, dos hermosos jardines invitan a pasear o descansar. El Jardín de los Maestros cuenta con árboles frondosos y plantas ubicadas alrededor de un estanque de lirios. En el Jardín Compton crecen los tulipanes que plantó la Reina Madre y un árbol de tronco rojo que conmemora una visita de la duquesa de Cornwall en 2008.
El hospital de la Santa Cruz está ubicado a 20 minutos a pie al sur del centro de Winchester, sobre un bello sendero que pasa junto al río. El hospital está abierto todos los días de la semana en verano y cierra los domingos de noviembre a marzo. Es una bonita visita que suele realizarse durante los viajes a Winchester.
