Braga maravilla con el encanto de una ciudad tan antigua como moderna. El nombre procede de la palabra protocelta “Bracara”, hogar de la tribu celta de los bracari, que vivían en castros conocidos como la “cultura castreña” hasta que fueron sometidos por el imperio romano. La propia ciudad fue fundada como “Bracara Augusta” en el año 20 a.C., durante el gobierno del emperador Augusto, para pasar después a manos visigodas, cuando desempeñó un papel importante en la cristianización de la Península Ibérica. La “Reconquista” cristiana, fue el centro espiritual de Iberia, hasta el auge de Santiago de Compostela.
La capital de la región portuguesa del Miño es hoy una demostración de la perfecta mezcla de la belleza de las épocas románica y portuguesa en la estructura arquitectónica. Embárcate en el viaje de una elegante ciudad surcada por antiguas callejuelas estrechas y un espléndido conjunto de iglesias barrocas. Te llevaremos a una exploración desde el Arco de la Puerta Nueva hasta la Iglesia del Convento dos Congregados. Con este recorrido, ¡conocerás las turbulentas historias históricas que rodean a esta ciudad!