La visita a la ciudad de Ammán comienza cuando el conductor te recoge en el hotel para dirigirte a la ciudadela de Ammán -también conocida como Jebel AlQalaea-, el lugar más famoso y conocido de la ciudad. La ciudadela es uno de los siete montes que ocupan la capital de Ammán y tiene muchas partes que datan de la época a.C., además del templo del gran Hércules, la torre de vigilancia de Ayyubaid y la estatua de la gran mano.
A continuación, visitarás el teatro romano de forma circular, que data de la antigua época romana y se utilizaba para conciertos y espectáculos musicales. El teatro tiene capacidad para 6000 personas y se sigue utilizando hasta hoy con el mismo fin.
Después visitaremos el Museo Arqueológico, que alberga valiosos objetos y artefactos de épocas antiguas, antes de pasar a ver el Museo del Folclore, que muestra una breve reseña de la historia y el patrimonio de Jordania.
Más tarde llega la segunda parte del día con una visita a una de las orillas del Mar Muerto para vivir una experiencia flotante. El Mar Muerto es uno de los mares más especiales de la planicie, donde no podrías hundirte aunque te lo propusieras debido a la elevada salinidad atribuida. La natación en el mar se utiliza con fines terapéuticos.
Por último, cenarás en un restaurante local antes de regresar al hotel.