Comenzarás el recorrido en el vestíbulo principal de la Grand Central Terminal. Aquí te reunirás con tu guía y un pequeño grupo de no más de 20 compañeros. Escucha hablar de Cornelius Vanderbilt, el magnate del ferrocarril detrás del ingenioso diseño de Grand Central, y de cómo hicieron falta tres versiones y una mezcla de tragedia e innovación para llegar a su diseño final. Muchos años después, estás caminando bajo los hermosos arcos elevados de estilo beaux-art de la explanada principal, que se han convertido en una piedra de toque cultural y en un camino transitado por numerosos héroes y villanos de Hollywood.

Después, entrarás en el Vanderbilt Hall. Años de abandono y deterioro motivaron a los neoyorquinos a devolver a Grand Central su antiguo esplendor. Contempla el famoso Reloj Tiffany en el exterior de la Plaza Pershing, así como una estatua construida para honrar la memoria de Vanderbilt. A continuación, baja por la rampa hasta el Oyster Bar, el primer restaurante de Grand Central, con un menú variado que refleja la identidad cultural de Nueva York.

Seguirás descubriendo un lado de Grand Central que la mayoría de los visitantes nunca experimenta mientras continúa el recorrido. Pon tus ojos en uno de los mayores departamentos de objetos perdidos no sólo de cualquier terminal ferroviaria, ¡sino de cualquier parte del mundo! Saldrás a la animada Avenida Lexington, desde donde tendrás una vista perfecta -y la oportunidad de hacerte una foto- del majestuoso Edificio Chrysler. Volviendo al interior, te espera el Gran Mercado Central, con más de 160 variedades de marisco y 400 tipos de quesos, lo que significa que tendrás mucho donde elegir.