Eichstätt se encuentra a ambos lados del río Altmühl en la Alta Baviera y es famosa por sus canteras de piedra caliza del Jurásico. Durante la Guerra de los Treinta Años, los suecos conquistaron la ciudad, que era considerada un bastión del catolicismo, y en 2008 Eichstätt celebró 1100 años de existencia. Admire el conjunto histórico del obispado y la antigua ciudad residencial con sus iglesias, magníficas plazas y elegantes palacios barrocos. Disfrute del ambiente barroco que le dan los edificios y plazas magistrales de la ciudad, refinados con elegancia.