La visita comienza con una breve sesión informativa. Sigue a tu guía para visitar el cercano museo etnográfico local. Pasea por el pittoresco centro histórico y conoce las plazas públicas y los monumentos que dieron forma a la primera capital. Visita la emblemática iglesia de San Miguel Arcanjo, y contempla la arquitectura del siglo XVI que la rodea, construida por los primeros colonos.

Sube a una furgoneta para un trayecto de 5 minutos hasta la capilla de “Nuestra Señora de la Paz” de 1764, con vistas a Vila Franca do Campo y al Islote, descubre una de las vistas más mágicas de la isla atlántica. De camino, haz una breve parada para una visita guiada a la plantación local tradicional de piñas en invernadero, para ver de primera mano cómo se cultiva tradicionalmente esta fruta genuina y peculiar, ¡un secreto de esta fruta famosamente dulce!

A las 17:00 es hora de volver a la Marina para la salida, pero no sin antes degustar el manjar local más buscado, la renombrada “Queijada de Vila Franca” para una relajante excursión que termina con una nota alta.