¡Dedica tiempo a lo que realmente quieres! Redescubre las auténticas emociones que sólo ofrece un Fiat 500 clásico: escucha el suave rugido del motor, sumérgete en las sensaciones de una conducción lenta y disfruta de los paisajes sicilianos que encontrarás. Gracias al fácil manejo del 500, puedes entrar fácilmente en las zonas de tráfico restringido y en los callejones más estrechos de la ciudad, adoptando la alternativa menos transitada, más larga pero ciertamente más emocionante. Vivir la experiencia de conducir un Fiat 500 Clásico se convierte en una oportunidad para saborear plenamente lo que te rodea: admirar la poesía de una puesta de sol, la belleza de un panorama o el encanto de un monumento. Elija el camino menos convencional y transitado para explorar maravillas escondidas, consciente de que a veces perderse puede conducir al descubrimiento de una belleza inesperada.

¡La recogida en el hotel es posible!