Actores profesionales representarán hechos minuciosamente investigados e historias entretenidas. Llevan a los visitantes a un viaje a un mundo olvidado hace mucho tiempo, lleno de vidas y destinos. La historia de la ciudad se hace viva y tangible en este recorrido.
Ahorcadores, putas y brujas: ¿qué tenían en común estas tres “profesiones” en Múnich? Pues bien, los verdugos no sólo estaban ocupados en cámaras de tortura o en un túmulo de la horca, ¡también eran proxenetas!
Este popular recorrido a pie gira en torno a la caza de brujas, la prostitución, la tortura y las ejecuciones. ¿Por qué, por ejemplo, las brujas vuelan en escoba? ¿Por qué el lugar de la ejecución estaba situado fuera de la ciudad? ¿Y por qué ya no existe la prostitución en el centro histórico desde los años 70?
Este recorrido a pie comienza en la Neuhauser Tor, donde los delincuentes eran conducidos a su ejecución fuera de la ciudad. Pasando por la histórica Salzstraße, llegarás al antiguo colegio jesuita de los tiempos de la caza de brujas. Una discusión entre la duquesa Renata y el padre jesuita Ignacio te traslada al oscuro siglo XVI: Cuando durante la construcción de la iglesia de San Miguel se derrumbó la torre, era evidente que “tan insólita tormenta había sido creada por las malditas malas mujeres”.
Pero no sólo se ejecutaba a las brujas: En la Schöner Turm escucharás la triste historia del desafortunado herrero del oro. Una fuerte ráfaga de viento te conducirá al monumento más emblemático de Múnich, la Frauenkirche, donde conocerás al mismísimo Príncipe de las Tinieblas: Descubrirás por qué el diablo ayudó al maestro de obras a construir la iglesia y por qué hace tanto viento aquí, así como la trascendental cuestión de la talla de zapatos del diablo.
Por el camino, escucharás historias de brujas sobre pociones, paseos en escoba, lenguas de sapo y manos de niño, hasta llegar al magnífico ayuntamiento, donde nos espera el alquimista Marco Bragadino. El supuesto herrero del oro intenta calentarnos con sus artes. En la Iglesia de San Pedro llegamos a conocer la vida cotidiana de un verdugo, cómo era, por qué era mejor evitarlo o cómo conseguir una soga para la horca.
También seremos testigos de cómo una bella mujer escapa de una muerte segura. En el antiguo ayuntamiento cruzaremos la antigua cámara de tortura mientras escuchamos historias truculentas. La Platzl albergó el barrio rojo de Múnich hasta los Juegos Olímpicos de 1972. Lo que la Banda de Spider Murphy cantaba en “Skandal im Sperrbezirk” es historia de la ciudad de Múnich: En la limpia y decente “ciudad cosmopolita con corazón” ya no había lugar para Rosi y sus colegas.