El Titanic, considerado “prácticamente insumergible” por sus constructores, encontró su histórico destino en una tranquila noche de abril. Ahora puedes ver el silbato, piezas de equipaje, objetos personales de los pasajeros y mucho más en esta increíble exposición.

En las primeras horas de la mañana del 15 de abril de 1912, antes de la primera luz del sol, el RMS Titanic chocó con un iceberg y causó uno de los desastres más mortíferos que las aguas en tiempos de paz han visto jamás. El legendario Titanic ahora descansa a 3.784 metros en las profundidades del océano Atlántico. El barco llevaba a algunas de las personas más ricas del mundo, así como a inmigrantes de Gran Bretaña y Europa en busca de una nueva vida en Norteamérica.

Desde el descubrimiento del naufragio en 1985, se han recuperado y expuesto numerosos objetos. Recorre esta exposición de 2.322,5 metros cuadrados y pasea por las fieles reproducciones de los camarotes de primera y tercera clase con muebles por los fabricantes originales.

Descubre objetos personales de los pasajeros, una recreación a escala real de la gran escalera, un sombrero de fieltro y piezas de vidrio. Escucha los ecos del motor y siente la misma fría brisa que sintieron los pasajeros en su trágico viaje.