Más que muchas ciudades de España, Barcelona es un crisol de culturas. Influenciados a lo largo de los años por culturas de dentro y fuera de España, los platos que hoy consideramos tradicionales no siempre formaron parte de la historia de Barcelona. Pero sin ellos la ciudad no sería la misma. En este recorrido, exploraremos una mezcla de negocios tradicionales y los que están escribiendo esa historia hoy, mientras descubrimos la Barcelona real a través de su comida.

Empieza la mañana en el Mercado de Santa Caterina, un favorito local donde los puestos son instituciones familiares desde hace décadas. Te entrelazarás con los lugareños que hacen sus compras mientras conoces sus costumbres y tradiciones cotidianas. Por el camino, harás dos paradas para probar varios quesos españoles, seguidos de embutidos, ¡incluido jamón ibérico!

A continuación nos dirigiremos a uno de los bares más queridos del mercado. Abierto desde la década de 1980, aquí es donde los lugareños paran para desayunar y comer mientras compran. Disfrutarás de una copa de cava espumoso (¡la verdadera forma catalana de empezar el día!) maridada con bocadillos del siguiente nivel, con delicias como la tortilla de espinacas **y la butifarra picante mallorquina.

Cuando salgamos del mercado, empezaremos a explorar el emblemático barrio del Born. Tu guía compartirá contigo nuestros rincones e historias favoritas del barrio, incluida la famosa iglesia de Santa María del Mar, que es el mejor ejemplo de arquitectura gótica catalana de la ciudad.

Nuestra siguiente parada gastronómica es una de las tiendas especializadas más antiguas de Barcelona, de hecho, ¡una de las últimas de su clase! Aquí probarás tres de los productos estrella de la tienda.

Tras una mañana de degustación por el barrio del Born, ¡es hora de dirigirse hacia el barrio de pescadores de la Barceloneta! Por el camino, tu guía destacará algunos de los rincones más interesantes del barrio.

En nuestra primera parada en la Barceloneta, ¡es hora de practicar el arte del aperitivo español! Visitaremos una bodega local para tomar un vaso de vermut y la tapa favorita de Barcelona: la bomba . Considerada por los barceloneses como la única tapa inventada en Barcelona, compartiremos contigo su colorida historia.

En nuestra última parada, ¡terminaremos fuerte con un almuerzo tradicional español! Visitarás un restaurante escondido en el barrio de pescadores que lleva abierto desde los años 50. Aquí disfrutaremos de algunas de las mejores paellas caseras de marisco de la ciudad, ¡maridadas con un fantástico vino local!