Testimonio del primer y único estadio de mampostería construido en la antigua Roma, las ruinas del Estadio de Domiciano (Patrimonio de la Humanidad de la Unesco) se encuentran a unos 5 m bajo el nivel de la calle, en la plaza Navona. Una rica selección de fotos inéditas, reconstrucciones tridimensionales, vídeos y paneles informativos introducen a los visitantes en la historia milenaria del Estadio, su desarrollo hasta convertirse en la plaza actual y la evolución de los antiguos deportes romanos. El billete de entrada incluye una audioguía en varios idiomas. Una visita media dura unos 40 minutos

Cuesta creer que bajo las bulliciosas calles que rodean la Plaza Navona yacen los restos de una antigua estructura romana, rica en historia fascinante. El Estadio de Domiciano, también conocido como Circo Agonalis, tenía capacidad para unos 30.000 espectadores y se utilizaba sobre todo para competiciones atléticas y combates. Esta enorme y espectacular arena al aire libre se llenó de multitud de gimnastas profesionales, que actuaban en disciplinas competitivas como carreras pedestres (en las que solían participar atletas femeninas), lucha, salto de longitud y lanzamientos de disco y jabalina. Las competiciones deportivas eran muy importantes entre los antiguos romanos, hasta el punto de que algunos de los vencedores tenían sus tumbas grabadas con sus nombres. El nombre inscrito en la lápida, curiosamente, era más valioso que el propio premio (una corona hecha de hojas de roble y olivo). Uno de los mayores lugares de ocio de la historia romana, hoy Estadio de Domiziano.

Elige la mejor opción para ti:

• Visita con audioguía

• Visita audioguiada + hora feliz. Esta opción incluye la reserva de una Happy Hour (cóctel nº 1 + aperitivos) desde uno de los miradores más fascinantes situados en el corazón de la Ciudad Eterna. Ésta es una de las grandes oportunidades que sólo una ciudad como Roma puede ofrecer. Un lugar que te encantará y te hará pasar momentos relajantes y románticos.