El parque Rainmaker es el hogar de algunas especies de animales interesantes, como algunas de las famosas ranas venenosas de dardo de colores, durante la caminata, el guía estará en todo momento en busca de las pequeñas criaturas que se esconden en el bosque, a pesar de que este no es un recorrido enfocado en el avistamiento de vida silvestre, siempre tratamos de encontrar la mayor cantidad posible. Nuestro primer objetivo es llegar a un mirador, esperando que las condiciones climáticas cooperen, la vista será increíble. Después del mirador llegaremos a los puentes colgantes, una de las principales atracciones de esta actividad, se trata de una red de varios puentes colgantes y plataformas conectadas en las copas de los árboles. Un poco más de caminata y habremos llegado a nuestra siguiente parada. Esta será en las pozas del río y las cascadas, hay varias y podemos detenernos para un refrescante chapuzón y un tiempo de relajación en tantas como desee, el tiempo no es un problema en esta actividad. Finalmente regresaremos al refugio donde se le servirá un almuerzo típico costarricense con una bebida natural.