En pleno corazón de La Haya, la Torre de La Haya se alza orgullosa junto a la Grote Kerk, testimonio de la rica historia de la ciudad. Esta estructura icónica, que en su día fue la torre de una iglesia, ha desempeñado muchos papeles cruciales a lo largo de su historia. Más allá de sus orígenes eclesiásticos, sirvió de vigía, faro, atalaya y reloj de la ciudad. Hoy en día, sigue siendo un querido símbolo de regreso a casa para muchos residentes de La Haya.
Desde 2017, la Torre de La Haya abre sus puertas a los visitantes, gracias al esfuerzo de los voluntarios de la fundación Ga Den Haag. Estos dedicados guías ofrecen recorridos que revelan la fascinante historia de la torre. Mientras exploras esta pieza tangible del patrimonio de La Haya, escucharás historias de su pasado, serás testigo de mecanismos centenarios aún en funcionamiento y te maravillarás con las impresionantes vistas desde la pasarela superior.
Con más de 600 años de historia, la Torre de La Haya no es sólo un punto de referencia de la ciudad; es una superviviente de revoluciones, restauraciones, guerras, la ocupación francesa y rayos. Figuras notables como Christiaan Huygens, Vincent van Gogh y Napoleón han ascendido a esta singular torre, contribuyendo a su legado histórico.
Subir a la Torre de La Haya es una experiencia accesible a casi todo el mundo que pueda subir escaleras. El ascenso incluye varios pisos en los que los visitantes pueden hacer una pausa y recuperar el aliento antes de continuar, mientras escuchan las historias del guía. Una vez arriba, las vistas panorámicas son espectaculares, con vistas del hermoso horizonte de La Haya, Róterdam e incluso el mar.
A los visitantes de habla inglesa se les facilita un folleto con la traducción del recorrido si lo solicitan en el centro de venta de entradas, aunque en la mayoría de los recorridos se habla inglés.
Tanto si eres un aficionado a la historia, un amante de la arquitectura o simplemente buscas unas vistas impresionantes, la Torre de La Haya promete una experiencia inolvidable que te conectará con el alma de La Haya.