Disfruta de una vista del Monte del Templo desde el Monte de los Olivos, y desciende hasta la Iglesia de la Agonía y el Huerto de Getsemaní, donde fue traicionado por Judas.
Entra en la Ciudad Vieja por la Puerta del Muladar y visita el Muro Occidental (Kotel), el lugar más sagrado del judaísmo.
Continúa hasta la Iglesia Cruzada de Santa Ana, donde se pueden ver los restos de las piscinas de Betesda. Sigue el Vía Crucis por la Vía Dolorosa, que termina en la Iglesia del Santo Sepulcro, lugar de la Crucifixión y la Resurrección.
Explora las callejuelas del mercado y la calle principal bizantina, el Cardo, con sus tiendas de los cruzados restauradas.
Sal de la ciudad vieja y conduce por el desierto de Judea, pasando por Jericó, hasta la costa norte del Mar Muerto para nadar y flotar en sus aguas ricas en minerales y disfrutar de un baño de barro.