Parte 1: Encuentro con la fauna en las Islas Ballestas (8:00 - 10:00)
Tu aventura comienza en el muelle de Paracas, donde embarcarás en una lancha rápida y navegarás por el brillante Pacífico. Al deslizarte por la costa, verás uno de los lugares más misteriosos de Perú: el geoglifo del Candelabro, una enorme figura de 150 m de altura grabada en la ladera del desierto. Su origen aún se debate, algunos dicen que es un faro para antiguos navegantes, otros lo relacionan con las Líneas de Nazca. En cualquier caso, es una oportunidad fotográfica perfecta.
Al llegar a las Islas Ballestas, conocidas como “las Galápagos de los pobres”, prepárate para verte rodeado de vida. Observa a cientos de leones marinos esparcidos por las rocas, ladrando, jugando y tomando el sol. Escanea los cielos y los acantilados en busca del piquero peruano, cormoranes, pelícanos y el esquivo pingüino de Humboldt, raro de ver en su hábitat natural. Y si tienes suerte, ¡puede que los delfines se unan a tu viaje!
También conocerás la sorprendente historia de la isla con el guano, que en su día fue la exportación más valiosa de Perú y ahora es un recurso natural protegido. Tu guía te contará historias fascinantes de esta industria del “oro blanco”, antaño en auge. Tras tu inmersivo crucero por la vida salvaje, regresa a Paracas sobre las 10:00 h. No olvides sacar unas cuantas fotos de los curiosos pelícanos que se posan en la orilla, cerca del muelle.
Parte 2: Desierto & Vistas al Océano en la Reserva Nacional de Paracas (11:00 - 15:30)
A las 11:00, cambia de mar a desierto con un viaje guiado a la impresionante Reserva Nacional de Paracas. Comienza en el Mirador de los Flamencos, donde -con un poco de suerte- verás a estas elegantes aves rosadas alimentándose a lo largo de la orilla.
A continuación, detente en el Centro de Interpretación, un pequeño pero impresionante museo que muestra la rica biodiversidad de la zona. Observa esqueletos de ballenas, cráneos de leones marinos y exhibiciones de pingüinos mientras tu guía comparte historias de la vida en este ecosistema costero único. Pero la verdadera emoción te aguarda cuando tu vehículo se dirija fuera de la carretera a través de paisajes desérticos surrealistas, serpenteando por dunas de color óxido y valles con costra de sal hasta llegar a la playa de Lagunillas, un dramático tramo de costa enmarcado por acantilados y aguas turquesas. Disfruta de un tranquilo almuerzo junto al mar en un restaurante local frente a la playa (opcional, no incluido), contempla las amplias vistas o sumérgete en el fresco océano si te apetece nadar. Tras una tarde rejuvenecedora, regresa a Paracas a última hora de la tarde con los sentidos llenos y la cámara a tope.