Cuando imaginas Hannover, ¿piensas en la CeBit Computer Expo o en la Feria de Tecnología Industrial Hannover Messe? ¡Prepárate para que te cojan por sorpresa! Hannover no es sólo el mayor recinto ferial del mundo y exposiciones de alta tecnología, sino también una ciudad con una rica historia, una ciudad que dio al mundo una monarquía que gobernó Gran Bretaña, una ciudad con gran cantidad de museos y lugares de interés cultural y con el mayor bosque urbano de Europa, el Eilenriede. Puede que el primer contacto con esta ciudad no te deje boquiabierto, pero dale algo de tiempo y te costará separarte de ella.
Visita la Iglesia del Mercado, la principal iglesia luterana de Hannover. Construido en el siglo XIV, se considera uno de los ejemplos más conocidos del estilo arquitectónico gótico de ladrillo del norte de Alemania. Aprende todo sobre la Fuente Oskar-Winter, una fuente local con una historia fascinante. La leyenda dice que si pides un deseo y giras el pequeño anillo de latón incrustado en el herraje, se hará realidad. Detrás de la fuente, puedes ver la Casa Leibniz, el lugar donde vivió el matemático y filósofo Gottfried Wilhelm Leibniz (1646-1716). Pasa junto a la Iglesia de Aegidien, recuerdo de los horrores de la guerra. Destruido durante la Segunda Guerra Mundial, nunca fue reparado ni reconstruido. Dentro de las ruinas, puedes ver la Campana de la Paz, donada por la ciudad de Hiroshima. Anualmente, el 6 de agosto a las 08:15, una delegación de Hiroshima viene a tocar la campana, en memoria de los que murieron durante el ataque aéreo. El Nuevo Ayuntamiento también tiene una historia interesante: cuando lo inauguró el emperador Guillermo II, el director de la ciudad anunció: “Diez millones de marcos, Majestad, y todo pagado al contado”. Hannover es sin duda un lugar de historias para aprender y enamorarse.