El pasado cobra vida en Siracusa, una ciudad repleta de patrimonio clásico y de flamante arquitectura barroca siciliana. Visitarás el teatro griego, te adentrarás en la Oreja de Dionisio y explorarás la isla de Ortigia, corazón del casco antiguo y lugar de joyas barrocas como la catedral.

Con más de 2.700 años de historia a sus espaldas, Siracusa es una de las ciudades más fascinantes de Sicilia. Tu viaje en el tiempo comienza en el Parque Arqueológico, al oeste de la ciudad. Descubre el Teatro Griego, que albergó a 15.000 espectadores en su época de esplendor, y sigue asombrando a pesar de los estragos del tiempo. También está el Altar de Hiero -una enorme losa de sacrificio-, la Oreja de Dionisio y el anfiteatro romano.

A continuación, cruzarás el puente hacia la isla Ortigia. Sus laberínticas calles están repletas de iglesias, palacios y castillos. Una visita guiada te llevará a las principales atracciones, incluida la catedral. Después tendrás un par de horas de tiempo libre para explorar a tu ritmo.