Empieza subiendo por las calles adoquinadas de Lisboa hacia la catedral de Lisboa, la iglesia en pie más antigua de la ciudad, que sobrevivió al destructor terremoto de 1755. Aquí tienes la oportunidad de explorar el interior de la Catedral si lo deseas, así como algo de tiempo libre para visitar la Iglesia de San Antonio, situada en la misma calle.

A continuación, baja hacia el vehículo con aire acondicionado para comenzar la visita panorámica en autobús de la ciudad, mientras tu guía te informa de los monumentos y lugares de interés que pasas por el camino. Algunos de los lugares más destacados son el ascensor de hierro fundido diseñado por uno de los alumnos de Eiffel, y la estatua del rey Juan I de Portugal, ¡el monarca que firmó la alianza militar más antigua aún vigente en Europa en 1386! En este recorrido, hay muchas oportunidades fotográficas con las vistas y el patrimonio cultural más espectaculares para que los explores. Tendrás la oportunidad de admirar el pintoresco paisaje de la Avenida de la Libertad, que mira hacia el casco antiguo de Lisboa. No olvides tu cámara, ya que este mirador es realmente espectacular.

A continuación te diriges a Belem, pasando por el acueducto de Lisboa, una estructura del siglo XVIII considerada la mayor construcción de ingeniería de Europa cuando se inauguró. Una vez en Belem, tendrás tiempo libre para descubrir monumentos, hacer algunas compras de recuerdos y, lo más importante, degustar las tartas de natillas portuguesas. En Belem se encuentra la Fábrica, que funciona desde 1837 con una receta que, según se dice, procede de los monjes que vivían en el cercano Monasterio de los Jerónimos.

Desde aquí, pasarás por la Torre de Belem, que está justo al lado de la costa de Lisboa, ¡así que ten preparadas las cámaras! Tu última parada será el Monumento a la Era de los Descubrimientos, donde tendrás una fantástica vista del puente 25 de abril, una copia del Golden Gate de San Francisco. Esta increíble pieza escultórica es un bello homenaje histórico a las muchas personas que participaron o celebraron aquel glorioso periodo de las expediciones portuguesas alrededor del Mundo. Aquí tendrás tiempo para contemplar las magníficas vistas del río Tajo y tomar algunas fotografías extraordinarias.

A continuación, tu transporte con aire acondicionado iniciará el regreso al puerto de cruceros, con tiempo suficiente para la salida de tu barco. A lo largo del camino, ¡todavía quedan cosas por ver! Prepárate para pasar por la Praça do Comércio, una de las plazas abiertas más bellas de Europa. Esta plaza se construyó como parte de la reconstru