Tu día comienza con la recogida personal de tu chófer de habla inglesa en tu hotel o apartamento de Roma. Tras una rápida introducción, acomódate en tu vehículo privado y pon rumbo a través de la campiña toscana hacia Siena, una joya medieval famosa por sus vinos y su encanto intemporal.
Disfruta de un relajante viaje por colinas onduladas, viñedos y paisajes rústicos. Tu chófer compartirá contigo sus impresiones locales a lo largo del camino, sugiriéndote paradas fotográficas en lugares de interés. Como el recorrido es totalmente personalizable, puedes decidir dónde y durante cuánto tiempo parar, adaptando el viaje a tu ritmo.
Al llegar a Siena, adéntrate en el Centro Histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y explora la Piazza del Campo, el corazón palpitante de la ciudad. Esta plaza en forma de concha es el lugar de reunión favorito de lugareños y visitantes, y alberga encantadores cafés, la llamativa fuente Fonte Gaia y el Museo Cívico, que alberga obras maestras de artistas sieneses.
Justo encima se encuentra el Duomo de Siena, una obra maestra gótica adornada con llamativas franjas de mármol blanco y negro, los colores simbólicos de la ciudad. En su interior, la catedral alberga una extraordinaria colección de obras de los más grandes artistas italianos. Aunque sólo la admires desde fuera, la grandiosidad de su fachada es inolvidable.
Desde Siena, tu chófer te llevará a San Gimignano, ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y famosa por sus torres medievales. La ciudad, que antaño ostentaba 72 altísimas estructuras construidas por ricas familias de mercaderes, aún conserva 15 de estos iconos de la rivalidad medieval. Pasea por la Plaza de la Cisterna, admira sus murallas del siglo XIII y empápate del ambiente de esta encantadora ciudad situada en lo alto de una colina.
Ningún viaje a la Toscana estaría completo sin vino. Por el camino, tu chófer te sugerirá bodegas y viñedos donde hacer una pausa para disfrutar de degustaciones. Recomendamos el Brunello di Montalcino, uno de los mejores vinos de Italia, que se disfruta mejor con quesos y embutidos locales para un almuerzo ligero perfecto.
Tras un día de historia, arquitectura y sabores indulgentes, relájate en el viaje de vuelta por la Toscana mientras tu chófer te lleva de vuelta a tu alojamiento en Roma.