La isla volcánica de Santorini se encuentra al norte de Creta. Y este viaje de un día en gato veloz es una gran oportunidad para verlo de cerca. Curvada alrededor de una colosal caldera llena de mar que se formó por una enorme erupción volcánica hace 3.500 años, es todo acantilados negros, pueblos encalados e iglesias con cúpulas azules. Es una Grecia de postal.

Una vez en tierra firme, emprenderás un recorrido panorámico, explorando muchas de las atracciones de la isla y aprendiendo sobre su historia. Explora un pueblo al borde de la caldera, donde las casas encaladas, las calles empedradas y las tabernas caen en cascada por el acantilado en empinadas terrazas.

Pasarás unos 90 minutos en Oia, repartidos entre la visita guiada y el tiempo libre. Luego sigue hasta Fira, la capital de la isla. Tendrás más o menos una hora para comprar golosinas en las pintorescas tiendas y boutiques. Visita algunos de los mejores miradores para hacer fotos: las vistas sobre la caldera son magníficas. Está hecho para los selfies.