Puentes japoneses con arcos sobre estanques cuajados de nenúfares, girasoles que se estiran hasta el cielo y coloridas flores que enmarcan el pintoresco hogar de Claude Monet en el pueblo de Giverny. Dirígete fuera de la ciudad para pasar tiempo explorando el encanto campestre y los paisajes que inspiraron a este maestro impresionista.

Suba a bordo de un cómodo autobús en el centro de París y prepárese para el paseo panorámico por la campiña francesa hasta Giverny, un grupo de calles empedradas y casas de piedra con vegetación y jardines de flores en cada esquina. El tiempo en Giverny puedes pasarlo como quieras, ya sea relajándote en un café de esta pequeña ciudad o metiéndote de lleno en la visita a la finca de Monet.

Explore la casa bien conservada del artista, con su estudio lleno de luz, muebles de época y una excelente colección de grabados japoneses. Explora las obras de arte de la tienda de regalos, el colorido hogar y las semillas de flores para después salir a los mágicos jardines. Un animado paisaje de arroyos, estanques, flores y sauces llorones se extiende sobre la propiedad y puedes imaginar al propio Monet pintando los juegos de luces sobre sus famosos nenúfares mientras te paseas por los jardines.

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