Al otro lado del Tajo, lejos del ajetreado centro de Lisboa, se encuentra un entorno bucólico. Visita la pintoresca Évora, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con sus monumentos góticos y barrocos, su vibrante mercado de abastos y su pintoresca vida callejera. Completa tu agradable jornada con una degustación de vinos tintos con cuerpo en una finca de primera categoría.

Protegida por murallas del siglo XIV, Évora es una de las ciudades medievales mejor conservadas de Europa, un lugar realmente encantador entre olivares, alcornoques y viñedos.

Pasea por estrechas callejuelas empedradas y contempla las altísimas columnas del templo dedicado a la antigua diosa romana Diana. Maravíllate ante la impresionante Catedral y su espacioso naval. Contempla la Capilla de los Huesos, cuyas paredes interiores están cubiertas y decoradas con cráneos y huesos humanos.

La fértil tierra que rodea Évora proporciona los abundantes productos frescos que se exponen en el colorido mercado. Empápate del vivo ambiente mientras paseas entre los puestos.

Largas filas de barricas pulcramente dispuestas ocupan las bodegas de una de las bodegas más conocidas de Portugal. Prueba aquí vinos finos y conoce el procedimiento de producción antes de regresar a Lisboa.