Los tesoros del pasado cobran vida en este fuerte y pueblo de comercio de pieles del siglo XVIII, reconstruido basándose en mapas históricos y más de 60 años de excavaciones arqueológicas. Al caminar por el sitio, retrocederá en el tiempo hasta 1781, cuando las fuerzas locales y globales desarraigaron a la comunidad cuando los soldados y civiles se trasladaron a la isla Mackinac. Después de seis décadas como un próspero centro económico, Michilimackinac llegó a su fin. Intérpretes históricos que representan a viajeros, soldados británicos y familias de comerciantes francocanadienses están estacionados por todo el fuerte para responder sus preguntas y realizar demostraciones. El pasado y el presente se confunden en una experiencia fascinante e inigualable en Colonial Michilimackinac. Observe el humo de los cañones, morteros y mosquetes y observe a los residentes preparar la comida y cuidar los jardines. En una de las excavaciones arqueológicas en curso más largas de América del Norte, los arqueólogos están en el lugar durante todo el verano, extrayendo historia del suelo, poco a poco.