En este original recorrido vivirás Praga a través de los ojos de uno de los compositores más famosos del mundo, Wolfgang Amadeus Mozart. Aunque Mozart pasó la mayor parte de su vida en Viena, fue la Praga del siglo XVIII la que respondió con más entusiasmo a su música, como él mismo dijo: “Mis praguenses me entienden”. ¡Descubre por qué Praga se enamoró de Mozart!

Elige la opción de 2 horas para un recorrido a pie con temática de Mozart. El primer punto de interés será el Teatro de los Estados, donde se estrenaron dos óperas de Mozart, incluida la representación de Don Giovanni, de gran éxito. Tras recibir una invitación especial para visitar Praga, Mozart llegó a la ciudad en 1787 y supervisó la primera interpretación de la Sinfonía n.º 38, conocida popularmente como la Sinfonía “de Praga”.

A lo largo del recorrido, oirás hablar de los días de Mozart en Praga y del gran aprecio que aquí se le tenía. Pasearás por la Plaza de los Tiempos Antiguos, verás el emblemático Reloj Astronómico, de 600 años de antigüedad, y te detendrás en el Palacio de Clam-Gallas, al que también acudió Mozart durante una de sus cinco visitas a Praga. Cruza el emblemático Puente de Carlos y contempla la Iglesia de San Nicolás, que alberga un órgano barroco que Mozart tocó en 1787. Mozart estrenó la Misa en do en esta iglesia.

Por último, visitarás el Museo Checo de la Música. No te preocupes por esperar largas colas, ya que con las entradas sin colas puedes dirigirte directamente a la entrada. El museo alberga una colección de instrumentos musicales y archivos. Entre sus tesoros se encuentran instrumentos con los que Mozart y Liszt tocaron durante sus visitas a Praga. Es una auténtica delicia para los aficionados a la música clásica.

Elige la opción ampliada de 3 horas para obtener entradas adicionales para el concierto nocturno de música de Mozart. En 1791, cuando Mozart fue enterrado en Viena, el dolor que se manifestó por el compositor en Praga superó con creces el presenciado en cualquier otra ciudad europea, y más de cien músicos actuaron en su funeral, al que asistieron miles de praguenses. Hasta hoy, Mozart es muy celebrado en la ciudad, y sus composiciones clásicas pueden escucharse regularmente en muchos locales prestigiosos.