Empieza el día con una visita guiada a pie por la mañana para descubrir el barrio más antiguo de la ciudad focea: el “Panier”, con el Hotel Dieu y la Antigua Caridad. No olvidemos el “Vieux port” y su originalísima “Ombrière”. Disfruta de la parte sur del puerto viejo atravesando la “Place aux huiles” hasta la Abadía de Saint-Victor. Súbete a la furgoneta para subir a la basílica de Notre-Dame de La Garde.

Hay algunos lugares en los que no puedes evitar enamorarte a primera vista, ¡y Cassis forma parte de ellos!
Conduce hasta el Cabo Canaille, el acantilado marítimo más alto de Europa, y disfruta de la vista panorámica sobre la bahía. Pasa algo de tiempo libre en el encantador puerto pesquero de Cassis para almorzar (posibilidad de bañarse o tomar el sol).

Posibilidad de participar en un crucero de 1 hora para descubrir las Calanques (billete de crucero no incluido), acantilados de piedra caliza que se sumergen en las cristalinas aguas azules del mar Mediterráneo y crean calas naturales (gordas garras rocosas que parecen fiordos noruegos y se adentran en el mar).

En Aix-en-Provence, pasea por el famoso Cours Mirabeau salpicado de refrescantes fuentes. Admira las mansiones privadas de los siglos XVII y XVIII. Tiempo libre antes de regresar a Marsella.