Esta excursión privada por la Toscana ha sido cuidadosamente diseñada para optimizar tu tiempo en Siena y San Gimignano, incluyendo traslados privados de ida y vuelta al puerto. Te sorprenderá todo lo que puedes experimentar en el transcurso de un solo día, descubriendo la rica historia de estas espectaculares ciudades al ritmo que más te convenga.
San Gimignano es una de las ciudades más bonitas de la Toscana: una encantadora ciudad medieval amurallada encaramada en lo alto de una colina, que ofrece unas vistas impresionantes de la campiña circundante. Tendrás tiempo de sobra para explorar San Gimignano en tu excursión en crucero, deambulando por sus estrechas callejuelas y saboreando la vida local en sus plazas.
En tu visita a la iglesia de la Collegiata, verás algunos frescos sorprendentes del siglo XII, como el Juicio Final de Taddeo di Bartolo, una aterradora visión del infierno. Tu guía experto te mostrará también otras obras de artistas toscanos, como La Creación del Mundo, de Bartolo di Fredi, y la Vida de Santa Fina, del pintor renacentista Ghirlandaio, enriqueciendo tu apreciación del arte al explicarte su contexto histórico y señalarte detalles intrigantes que de otro modo podrías pasar por alto.
Un paseo por el centro histórico de la ciudad nos lleva a la antigua fortaleza de San Gimignano, conocida como la Rocca. Tu visita privada a San Gimignano terminará con una subida a la torre, admirando las espectaculares vistas de la ciudad y del más allá.
Nuestra siguiente parada es la ciudad medieval de Siena. Allí explorarás las atmosféricas callejuelas y las grandes plazas de Siena, aprenderás todo sobre la rica historia de la ciudad y comprenderás por qué lleva siglos encantando a sus visitantes.
La más famosa de las plazas de Siena es la magnífica Piazza del Campo. Pasearás por la plaza, admirando su arquitectura mientras aprendes sobre la política y el comercio de la ciudad medieval con tu guía personal.
Desde la Piazza del Campo, hay un corto paseo hasta otra famosa plaza de Siena, la Piazza del Duomo. La plaza está dominada por la imponente catedral del siglo XIII, que tiene una llamativa fachada de mármol blanco y negro. En tu visita a Siena aprenderás todo sobre la historia, los mitos y las leyendas de este extraordinario lugar, y descubrirás por qué el blanco y el negro son los colores tradicionales de la ciudad.
El Duomo de Siena cuenta con un asombroso conjunto de obras maestras, desde una estatua del joven Miguel Ángel hasta una escultura en bronce de San Juan Bautista, obra de Donatello. También verás obras de Bernini y varias obras maestras del arte medieval y renacentista. Destacan los vibrantes frescos de la Biblioteca Piccolomini, con un techo que rivaliza con el de la Capilla Sixtina.
Tu viaje a Siena terminará con un breve paseo hasta la Basílica de San Domenico, que se encuentra en lo alto de la colina, donde disfrutarás de las impresionantes vistas panorámicas de la campiña: el final perfecto para un día memorable en la Toscana.