El castillo de Wawel fue la residencia de la familia real de Polonia hasta 1795. Es motivo de gran orgullo polaco y se alza como uno de los edificios más espectaculares en la cima de la colina de Wawel.

Durante tu visita al castillo, tendrás la oportunidad de presenciar la grandeza del pasado de Polonia mientras atraviesas las magníficas salas del castillo.

En la actualidad, el castillo también alberga un museo que incluye bellos artefactos conservados de los tiempos históricos en que reyes y reinas gobernaban el país. Durante el recorrido, también podrás visitar los apartamentos privados reales, adornados con exquisitos tapices, cuadros y lámparas de araña.

El castillo funciona como museo de arte de primer orden e incluye también una sección de Arte Oriental con la mayor colección de tiendas otomanas del continente europeo.

Este castillo del siglo XIV, construido por el rey Casimiro II el Grande, estaba en la cima de su opulencia en el siglo XVI, cuando el rey Segismundo el Viejo encargó ampliar el castillo y construirlo hasta su aspecto actual.

Una vez en el castillo, te transportarás a la época de reyes y reinas mientras tu guía comparte información sobre la realeza que vivió en el castillo y los mitos que rodean este hermoso lugar.

También puedes ver la exposición de Wawel, que muestra objetos descubiertos en excavaciones arqueológicas por toda la región. También incluye maquetas de edificios y otros elementos arquitectónicos.

El Castillo de Wawel está reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y se sabe que tiene una inmensa importancia cultural e histórica en Polonia.