Esto no es una gira sobre el pasado.
Se trata del presente que vive dentro del pasado.

Caminaremos por el Palacio de Diocleciano y el casco antiguo, no para recitar la historia, sino para conocer a las personas que la llevan.

Esta gira es sobre el pulso de Split hoy, contada a través de voces que rara vez llegan a los libros de historia.

Entraremos en una panadería de trabajo, un taller de filigrana donde los hilos de plata se convierten en reliquias.
Caminaremos por las calles donde todavía se encuentra una de las sinagogas más antiguas de Europa.
Pasaremos por la comunidad musulmana local, donde la fe y la vida diaria se encuentran tranquilamente.
Y mientras nos movemos, verás el Palacio de Diocleciano como lo que realmente es:
No es un monumento sino un barrio.

Esta es una ciudad en la que nunca se dejó de vivir.
Las piedras son viejas, pero las historias están en curso.