Después de una caminata de aproximadamente una hora, llegamos a la cima de una de las vistas más hermosas de la ciudad, ¡donde podemos hacernos una idea del bosque urbano más grande del mundo! Tenga la oportunidad de observar la fauna y la flora, comprendiendo la necesidad de su preservación, conociendo su historia y entendiendo por qué Río de Janeiro es una de las ciudades más bellas del mundo. Después paramos en unas cascadas para contemplar y darnos un baño también. Finalmente, nos detuvimos en una de las postales de la ciudad, Vista Chinesa, con una vista espectacular, completando esta experiencia única en esta maravillosa ciudad.