El pico y la localidad de Kyparissia (que significa “lugar de cipreses”) tienen una de las pocas manchas con alta concentración de cipreses de Chipre. La ruta a pie comienza a treinta minutos en coche de Limassol, y ofrece unas vistas preciosas, sobre todo hacia el mar, desde una distancia incluso inferior a ocho kilómetros en algunos puntos. También se ve un número significativo de pinos calabreses en la ruta, así como un gran número de otras especies vegetales autóctonas. Lo que destaca a lo largo de estos senderos son las vistas. En muchos tramos hay vistas ininterrumpidas hacia la costa, así como hacia el lago artificial Germasoyeia (a menos de tres kilómetros desde algunos puntos de la ruta). Hacia el noroeste especialmente, hay vistas de varios picos, uno detrás de otro.
La ruta es especialmente atractiva para quienes no quieren alejarse mucho de Limassol. Como la altitud oscila entre los 500 y los 700 metros, este corto paseo puede disfrutarse también en verano, sobre todo lejos del calor del mediodía.