Es difícil encontrar en todo el mundo una zona más particular que el parque marino de Ang Thong. El archipiélago cuenta con 42 monolitos de piedra caliza, que se elevan a una altura de 400 metros sobre el nivel del mar. Abarcando unas 10.000 hectáreas, este grupo de islas es un ejemplo de que lo significa paraíso tropical. El mar que rodea las islas está repleto de vida marina, por lo que hacer buceo con tubo o submarinismo es una actividad obligada, y la altura de las junglas tropicales ofrecen vistas espectaculares.
Haz buceo con tubo en las playas perfectamente delimitadas o bucea en los arrecifes de coral. Explora las entradas a las cuevas esculpidas por el mar durante milenios o dirígete a la orilla y relájate en la playa. La isla de Koh Mae cuenta con un sendero que te llevará a la cima de la colina donde podrás hacer fotos inolvidables. La mayor parte del sendero es un camino con tablas de madera no obstante, necesitarás estar medianamente en forma para llegar a la cima.
Disfruta de la belleza del lago Esmeralda en Koh Mae. Este lago de agua dulce se llena a través de túneles marinos subterráneos y merece la pena el paseo, lo que incluye subir por una escalera de madera, para acceder a él. Aunque no se permite nadar en el lago Esmeralda, encontrarás una extensa playa en la costa de Koh Mae. Si necesitas un descanso, dirígete a las instalaciones principales del parque en Koh Wua Talab, donde podrás comer algo en el restaurante.
Desde tierra firma suelen salir cada mañana barcos desde Koh Samui encontrarás operadores que dan servicio tanto en las costas occidentales como orientales con diferentes precios y prestaciones. Las opciones incluyen desde un lento transbordador hacia las islas con un grupo más grande de personas o una lancha privada que hace un programa según lo que quieras hacer. Puedes vivir diferentes experiencias, aunque mientras más gastas más flexibilidad tienes.
El Parque Marino Nacional de Ang Thong se encuentra a 30 kilómetros al noroeste de Koh Samui. En ocasiones, el parque cierra durante noviembre y diciembre por la temporada monzónica.