Tu viaje a Taipéi no estará completo sin una visita al sorprendente Monumento a Chiang Kai-shek, dedicado al líder político y militar que dirigió el Gobierno Nacionalista de China como presidente de 1950 a 1975. Descubre la historia de Chiang Kai-shek y de la China del siglo XX a través de fotografías, dibujos y el impactante diseño arquitectónico del monumento.
Este elegante edificio se encuentra dentro de 25 hectáreas de jardines y senderos y se construyó en mármol blanco con un tejado de mosaicos azules sobre fondo rojo. Estos tres colores representan la bandera nacional y los valores de libertad, hermandad e igualdad. Sube los 89 peldaños que llevan al museo. Cada uno de ellos simboliza un año de la vida de Chiang Kai-shek. En el interior del museo verás pertenencias del presidente de carácter militar, como medallas y uniformes. Los caracteres chinos de la pared representan los valores políticos de ética, democracia y ciencia que promulgaba Chiang Kai-shek.
También podrás contemplar los largos Cadillac blindados en los que viajaba Chiang Kai-shek. En el salón principal se encuentra el elemento más impresionante de todo el monumento, la estatua del propio Chiang Kai-shek sentado sobre una silla, protegido solemnemente por soldados. Si planeas la visita de forma que coincida con la hora en punto, asistirás a la impresionante ceremonia del cambio de guardia.
Ya fuera del monumento, podrás descansar en algunos de los mejores jardines y patios de Taipéi. Escucha el sonido de las cascadas y recorre los jardines chinos llenos de puentes ornamentales. Visita los estanques de Yunhan y Guanghua, cuyos nombres representan la Restauración de China. Al otro lado de la plaza se encuentran el gigantesco Teatro Nacional de la Ópera de Taiwán y el Auditorio Nacional. Esta zona tiene una amplia oferta de galerías de arte, bibliotecas, tiendas y restaurantes que harán las delicias del viajero. Durante los fines de semana se organizan exposiciones de arte y actuaciones musicales al aire libre, o puedes reservar una entrada para el Auditorio Nacional y disfrutar de un concierto, un espectáculo de danza, una obra de teatro y otros eventos culturales.
Dedica un día para visitar el monumento si quieres sumergirte por completo en la historia cultural y política de Taiwán. El Monumento a Chiang Kai-shek abre todos los días y puedes llegar fácilmente en autobús urbano o tomar el metro y parar en la estación del monumento.