Rennes es la capital de la región de Bretaña, al noroeste de Francia. La enorme plaza del centro está rodeada por estructuras de gran importancia histórica. Visita los distintos museos de arte e historia que están repartidos por la ciudad junto a los parques, jardines y edificios universitarios. La ciudad es sede de varios festivales anuales de cine y música.
Verás la Places des Lices en el centro de la ciudad. Por su ubicación accesible y práctica, es un popular punto de encuentro para habitantes y viajeros. Visita el mercado de la plaza central, que lleva a la Place Rallier-du-Baty. La plaza está rodeada por unas majestuosas casas de campo.
La Catedral de Rennes, que data del siglo VI, tiene un diseño neoclásico con dos torres llenas de ventanas y adornos elegantes. Recorre su interior y echa un vistazo al elegante techo arqueado y a las columnas a ambos lados de la nave. También se la conoce como la Cathédrale Saint-Pierre de Rennes.
Dirígete al Palais du Parlement de Bretagne, una maravilla del siglo XVII y el último edificio en albergar el viejo parlamento de Bretaña. Actualmente, acoge la corte de apelación de la ciudad de Rennes. El gran diseño del edificio consta de un piso gris inferior, un segundo piso blanco y un techo decorado con barrotes y estatuas de oro.
Observa la amplia colección arqueológica del Musée de Bretagne, que va desde la prehistoria hasta los tiempos modernos. Conoce la historia de Alfred Dreyfus, un general del ejército que fue acusado erróneamente de un crimen.
El museo comparte el edificio con una gran biblioteca y el Espace des Sciences, un centro que da vida a la ciencia con exhibiciones interactivas. Lleva a los niños al laboratorio de Merlín, en el que podrán hacer sus propios experimentos.
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