En los viajes a Bratislava es difícil pasar por alto la torre de ladrillo blanco con chapitel de cobre verde de la puerta de San Miguel. Si paseas por los lugares de interés histórico del casco antiguo pasarás, inevitablemente, por este importante punto de referencia que solía marcar la entrada a la ciudad. En su interior podrás disfrutar de vistas inmejorables de la zona y de las exposiciones de un interesante museo.
La puerta de San Miguel es una de las cuatro presentes en las murallas que protegían Bratislava. Se construyó en el sigloXIV, aunque la peculiar silueta abultada del chapitel fue el resultado de las modificaciones que se realizaron en la estructura a mediados del sigloXVIII.
Si te acercas a ella y miras hacia arriba, te sorprenderán los siete pisos que elevan la construcción hasta los 51metros de altura. Observa la estatua del arcángel Miguel luchando contra el dragón que da nombre a la puerta. Si bajas la mirada, verás en el suelo un círculo dorado conocido como "kilómetro cero", un marcador para medir distancias respecto a otras ciudades capitales del mundo.
Aprovecha para visitar el Museo de Armas, donde descubrirás cómo se ha defendido la ciudad en el pasado a través de una serie de armas históricas, equipamientos y uniformes, que ofrecen una visión fascinante del Ejército eslovaco. Desde aquí, también podrás disfrutar de unas excelentes vistas de la distribución del casco antiguo de Bratislava y del castillo en la distancia.
Continúa el paseo por las calles que rodean el monumento. La calle Baštová, una vía estrecha y empedrada con edificios altos a ambos lados, presume de ser la más romántica de la ciudad. Y las cafeterías de la zona son perfectas para tomarte un descanso cuando el cuerpo te lo pida.
El museo instalado en la puerta de San Miguel abre todos los días excepto los lunes. Para acceder hay que pagar una módica cantidad. No obstante, esta entrada también permite acceder al contiguo Museo de la Farmacia, donde obtendrás información fascinante sobre la historia de la medicina.
La puerta de San Miguel está a tan solo unos minutos de otras atracciones, como el antiguo ayuntamiento y el Palacio del Primado, lo que lo convierte en una parada muy cómoda si piensas pasear por Bratislava. Puedes llegar a la zona en tranvía y bajar en una de las calles próximas al monumento.