Descansa y disfruta de la suave arena de la playa de Amadores o nada en sus aguas tranquilas y cristalinas. Contempla los barcos del puerto y saborea platos de pescado fresco en uno de los excelentes restaurantes de la costa.
A diferencia de muchas playas de Gran Canaria, Amadores se encuentra protegida de casi todo tipo de viento y del oleaje que azota la isla. Esto, además de la prohibición de molestar con música alta y deportes de playa ruidosos, la convierte en uno de los lugares más tranquilos de Gran Canaria para descansar junto al mar. Y, con una longitud de 800 metros, nunca se llena de gente. En ella encontrarás todos los servicios necesarios para pasar un día de relax en la playa.
Coloca la toalla sobre la arena y pasa la mañana leyendo o descansando. Los únicos sonidos que escucharás serán el canto de los pájaros y el rumor de las pequeñas olas que bañan la orilla. Si el día es caluroso, comprobarás que el océano está a la temperatura perfecta para refrescarse. Y, gracias a su ubicación protegida, el agua siempre está cristalina y es segura para nadar. Quizá te apetezca llevar equipo de buceo de superficie y buscar bancos de peces de colores.
Después, pasea por la bahía hasta llegar al hermoso puerto. Allí, los lujosos yates se mecen en sus amarraderos y, si miras hacia el horizonte, verás los barcos de pesca que vuelven después de una mañana de faena. Si el día es soleado, desde la playa es posible ver el monte Teide en la isla de Tenerife. Cuando te canses del sol y el mar, puedes acercarte a uno de los bares que dan a la arena y disfrutar de una cerveza fresquita o un cóctel mientras el sol se pone detrás de la montaña. Desde allí, dirígete después a uno de los restaurantes cercanos y prepárate para una buena cena a base de deliciosas tapas o del pescado fresco local.
En 2004, Amadores recibió el certificado Bandera Azul por sus altos niveles de calidad y seguridad. Los servicios son excelentes: hay duchas de agua corriente y tumbonas para alquilar por un módico precio. Te recomendamos alojarte en uno de los lujosos hoteles en primera línea de playa. Pero, si el presupuesto no lo permite, puedes llegar a ella en uno de los autobuses regulares que la conectan con la mayoría de las localidades cercanas.