Descubre una extensa variedad de terrenos en el parque natural Paneveggio-Pale di San Martino, una impresionante reserva que constituye la quintaesencia del encanto del norte de Italia. En verano el lugar es perfecto para caminar a través de verdes prados salpicados de bosques y arroyos, y el invierno invita a esquiar o pasear con raquetas de nieve sobre paisajes vírgenes cubiertos de nieve. El parque cuenta, además, con cuatro museos que describen la historia de los Dolomitas. Durante tu recorrido, verás a los ciervos pastando y también a gente que realiza su trabajo diario, ya que muchos lugareños se ganan la vida con lo que extraen de la naturaleza de la zona.
El parque es un área protegida desde 1967, pero su extensión se ha ampliado considerablemente a lo largo de los años y, en la actualidad, es posible pasar días explorando sus 190kilómetroscuadrados de superficie. Déjate sorprender por las vistas que se abren ante ti mientras paseas por los Dolomitas de Pale di San Martino, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Descubre las formaciones volcánicas únicas del macizo de Lagorai y disfruta de la tranquilidad que se respira entre los altísimos abetos, alerces, pinos y hayas de Paneveggio, la enorme zona boscosa que da nombre al parque. En este hermoso entorno comprenderás por qué el lugar cuenta con la Carta Europea de Turismo Sostenible, que se le otorgó en 2015.
Te recomendamos comenzar la visita en la Villa Welsperg, una casa histórica que era una antigua residencia de la nobleza y está situada en la bella Val Canali. En la actualidad es un centro de información turística con una excelente colección de exposiciones sobre la región. En ellas se tratan temas como la geología y la flora locales. Quizá te apetezca dar un paseo por el tranquilo jardín del recinto, adornado con estanques, rosales y un laberinto, antes de salir a descubrir el parque, muchísimo más amplio y, por supuesto, salvaje.
Paneveggio-Pale di San Martino está situado al este de Trentino, a unas dos horas en coche de Trento, la ciudad más grande de la zona. Hay que abonar una módica entrada. También hay visitas guiadas disponibles con un pequeño coste adicional. No olvides consultar los horarios de apertura antes de tu visita, ya que varían según la temporada.