Si hubiera que escoger una playa emblemática de Ibiza, sería Las Salinas. Este largo trecho de suave arena dorada se halla a los pies de una reserva natural llena de pinos. Las Salinas es única debido a su emplazamiento, adyacente a las grandes salinas de las que recibe su nombre. Estas salinas se merecen una visita por derecho propio, ya que han sido fuente de sal durante cientos de años. Debido a la proximidad de la bahía, el mar es especialmente salado en esta zona, lo que hace que los bañistas puedan mantenerse a flote con divertida facilidad.
Muchas personas pasan el día en Las Salinas como preámbulo para el famoso ambiente nocturno de Ibiza. Aquí, los trajes de baño son pequeños o incluso opcionales y la música está siempre retumbando. La playa de Las Salinas siempre ha sido un imán para ricos y famosos, y no es raro encontrarse en ella a estrellas sobre las que acabas de leer en las revistas.
Jalea a los destacados DJ, que pinchan sus ritmos todo el día en los clubes ubicados junto a la playa. Estos lugares son muy exclusivos, así que vete preparando el bolsillo si decides acercarte. A cambio, te tratarán como una estrella y te servirán los cócteles en la tumbona.
Aunque Las Salinas es famosa por su ambiente de marcha, también ofrece actividades más tradicionales de costa. Con 1,6 kilómetros (1 milla) de largo, se trata de una playa bastante larga y, en días de viento, la bahía es un lugar adecuado para el surf y el windsurf. Si quieres algo diferente, alquila un patín o catamarán, o practica el buceo. Cerca de la playa existen varias calas recónditas y paseos enclavados en el entorno natural también es posible caminar hasta la antigua torre de vigilancia, que algún día servía para avistar piratas.
La playa de Las Salinas se encuentra a 10 minutos en coche al sur de la ciudad de Ibiza y se puede llegar en taxi o en autobús. Si te desplazas con un coche de alquiler y estás de visita estival, llega temprano para asegurarte un lugar para aparcar. La playa cuenta con puestos de alquiler de sombrillas y tumbonas, así como de duchas para quitarte la sal de la piel antes de entrar en un club.